Los saltillos de Escolar han completado el viaje de Ávila a Pamplona, y ya reposan en el Gas, a la espera del encierrillo que los habrá de llevar hasta el corral de Santo Domingo.
Han venido cinco cárdenos, y dos negros; un par, cinqueños. La ganadería de José Escolar está formada a partir de los Albaserrada de Victorino Martín, y pasta en la finca Monte de Valdetiétar, en Lanzahita. De los llegados, el de menos peso porta 490 Kg, por una romana de 610 para el de más.
Pareja, seria y con cara, será lidiada el día 8 de julio, cumpleaños de la sobrina nieta del inventor del Chupinazo, Beatriz Echaide. Se enfrentarán a ella (a la corrida, no a Beatriz) los diestros Javier Castaño, Emilio de Justo y Gonzalo Caballero. Este último fue corneado al estoquear al tercero Escolar en 2017, por lo que no pudo matar su sexto. El primero fue una alimaña con la que Eugenio de Mora estuvo profesional. El segundo, soso con un punto de manso.
Cuarto y quinto, Diputado y Sevillano, dos grandes toros. Diputado fue el animal que se negaba a correr el encierro. Eugenio de Mora, entre tormenta y meriendas, no se percató de la res que tenía y cosechó palmas, cuando el material era para más. Y Pepe Moral se hizo con un apéndice de un toro que era para ir en el arrastre sin ninguna.
Costurero, de este hierro, se llevó el premio Carriquiri 2015. Paco Ureña le cortó una oreja que, con otra que ya tenía en el coleto, permitió al diestro salir a hombros por la puerta grande.
Jesús Javier Corpas Mauleón